CAPITULO 9- La despedida

Después de la comida me llevó a casa. Me arreglé para una despedida, cogí el coche y fui al aeropuerto.

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Ya se ha ido, ahora me siento vulnerable, creo que cualquiera puede hacerme daño, él no está para defenderme y yo…Tengo miedo de que pueda pasar algo con Justin, intentaré salir siempre con alguien para no encontrármelo a solas, seré fuerte, al menos lo intentaré. Siempre había sido Taylor el que colocaba las dudas en su mente, el que pensaba en que algo podría pasar, y yo le daba mi confianza negándoselo todo. Ojalá él estuviese aquí acompañándome, y en su lugar son las dudas las que están conmigo, y no se quieren ir.

Poco a poco me quedo dormida…

Me despierto, abro los ojos lentamente y miro el reloj, las 12. Me levanto perezosa y voy al espejo, me siento mona. Llevo puesta una camiseta negra floja. Suena el timbre, me lavo la cara y bajo. Cuando estoy al lado de la puerta suena le móvil, abro la puerta sin mirar y voy a cogerlo. Es Taylor.

-Hola mi amor.-digo mientras bajo por las escaleras, miro a la puerta, Justin.

(Móvil)-Hola cariño, ¿Qué haces?

-Nada, me acabo de despertar.

-Hola muñequita, ¿que haces?-dice Justin haciéndole burla a Taylor.

-Espera.-le digo a Taylor.- ¿Qué quieres?

-Nada, venía a verte.-dice y me saca el móvil.

-¡¿Qué haces?¡-digo alterada.

-Ahora Alice está ocupada, no tiene tiempo para que la molestes con tus interrogatorios.-le dice a Taylor, luego cuelga.

El móvil vuelve a sonar, pero Justin lo apaga y le quita la tarjeta.

-¿Por qué has hecho eso? Ahora tendré que explicarle todo esto.

-Si estuvieses conmigo serías libre Alice.

-Me da igual, estoy con Taylor. Quédate el móvil.- digo y cierro la puerta.

-Alice! Abre!- escucho a través de la puerta.

-No te escucho.-digo mientras subo las escaleras.

-Muy bien, a tu madre le encantará saber con que tipo de chicos andas cuando le llame desde tu teléfono al llegar a casa, también me quejaré, ¿qué clase de chica le cierra la puerta en los morros a un chico como yo?-Al oírle me acojono un poco.

-No eres capaz.-digo sin creerlo.

-Sabes que si.

Bajo las escaleras y le abro.

-Pasa, pero solo unos minutos.

-Eso ya lo veremos.

-Siéntate.-le invito a pasar al salón.

-He venido para que me expliques.

-¿El que?

-¿Qué haces saliendo con Taylor?

-Taylor es buen chico, me quiere, me cuida y sobre todo le quiero.

-No le quieres.

-¿Por qué? ¿Por que lo dices tú?

-No, porque desde que me viste al abrir la puerta te pusiste nerviosa, mirate, si estás temblando.

-Mira Justin, seré breve, si, te quiero, pero estoy con Taylor y nada lo va cambiar; además, tú no me quieres de verdad, no sabes lo que es eso, solo sabes acostarte con una chica y luego tirarla a la basura, eres así, eres incapaz de amar Justin, no podrías amarme, y Taylor si.

-¿Eso es lo que crees? Está bien.

-Dame el móvil.

-Toma tu móvil y tu tarjeta, si crees que soy un bicho sin sentimientos, así seré contigo a partir de ahora. Buenas tardes.-he herido sus sentimientos, lo sé, pero quizás odiarme sea la única manera de que me deje en paz.

En el momento que se va, cojo el móvil y llamo a Taylor, miro el reloj, ha pasado media hora, no me coge, vuelvo a llamar, no contesta; lo vuelvo a intentar y nada. Supongo que me llamará luego…