viernes, 5 de septiembre de 2014

CAPITULO 20- La cena.

Tan fácil como intentar olvidarse de Taylor. Y es que eso no es sano. Antes de nada debe aceptar esa cita y ver que pasa. Quizás cuando el día haya terminado tenga la mente más despejada y las cosas más claras.
Se levanta de la cama y se despereza, poco a poco se va acostumbrando a la luz. Camina al baño y abre el grifo de agua para que se vaya calentando. Coge su móvil y busca a Justin. Le enviará un mensaje.

-Me gustó mucho el batido de ayer. Sabes conversar, así que está bien. Acepto cenar contigo. A las 8 puedes venir a buscarme para nuestra…cita.-Y al final una carita sonriendo.

-Me alegro de que hayas aceptado. Lo pasaremos bien. Nos vemos. Un beso.

Y así con una sonrisa se mete en la ducha. Después de todo quizás sí sea una buena idea dejar que pase el tiempo. Además Justin es un chico muy guapo. Y una vez ya estuvieron muy cerca del amor. Quizás esta vez si puedan llegar a quererse.
Sí, él le enseñará a olvidar. O al menos a cerrar las heridas.

-Las 8 en punto de esa tarde-

La ve bajar. Es tan guapa. Lleva una camisa negra floja y una falda de tubo blanca, como separación un cinturón marrón a juego con las sandalias, también marrones. Y el pelo recogido en una trenza. Está realmente bella. Además se ha maquillado un poco, debe de haberse echado base, porque tiene la piel más oscura y viva.
-Hola-sonrisa.
-Hola-otra sonrisa.
Se acercan y dos besos.
-Vaya, estás muy guapa.
-Gracias-se sonroja- tú también estás muy guapo.

-Minutos antes en ese lugar al otro lado de la puerta-

Ya está ahí, ese era su mensaje. En el  momento en que abra la puerta su vida cambiará, porque este es un gran paso para dejar atrás el pasado.
3…2…1…0
Ahí está, muy guapo. Lleva una camisa de cuadros grises y blancos, por debajo una camiseta blanca. Un pantalón negro y unas zapatillas deportivas grises. Y tiene el pelo diferente, ¿es eso un tupé? Si no lo es, se parece mucho. Pero le queda bien.

-En este momento-

-¿A dónde vas a llevarme?-sonrisas.
-Pues la verdad es que tenía pensado que vayamos a un restaurante italiano que hay cerca de aquí.-le abre la puerta del coche para que suba.
-Vaya, que caballero. Me siento toda una lady.-risas.
-Es que lo eres, toda una señorita.

-Minutos más tarde en un restaurante italiano-


-Dios mío, no puedo más. Creo que si me pinchasen la barriga con una aguja explotaría.
-Tú siempre con ese humor tan malo.-risas.
-Ya me conoces, soy todo un humorista.
-Sí, quizás tengas futuro como cómico en un bar de carretera.
-Vaya, así que tú también tienes sentido del humor.
-Hay muchas cosas que aún no sabes de mí Justin Bieber.
-Pero para eso estamos aquí ¿no? Para conocernos mejor.
-Así que es verdad. Has cambiado. Nunca pensé que podríamos tener una conversación tan amistosa después de todo. Sabes que siempre has sido un arrogante y un chulo conmigo.
-Pues sí, las cosas han cambiado y ya no soy el mismo. En cambio tú, vuelves a ser la que eras. Estos meses has estado muy triste, de bajón. Y hoy por fin as vuelto a sonreír como antes.
-Sí y aunque me cueste reconocerlo, has sido tú quien lo ha logrado. Tú me has sacado de casa y de mi mundo. Tú me has hecho sonreír después de tanto tiempo.
-Me alegro de haber contribuido a tu felicidad.
-Gracias Justin, gracias por todo. Me has hecho ver que hay que seguir adelante, por muchas cosas que nos haga la vida hay que continuar.
-Quiero hablarte claro Alice.
-Bien, dime lo que quieras.
-Me gustas-sonrisa irónica de ella- enserio. Lo que siento es real. De hecho voy a demostrarte que puedes volver a enamorarte.
-Justin…Que haya aceptado venir y que ahora te haya querido agradecer todo lo que has hecho por mí no quiere decir que vaya a enamorarme de ti. No creo que sea tan fácil.
-Pues yo sí lo creo. Es más, te lo prometo.
-¿Qué?-dice ella con cara de no entender nada de todo esto.
-Te prometo que te enamorarás de mí. Además te juro que será muy fácil.
-¿Cómo puedes estar tan seguro?
-Porque a mi solo me hizo falta un segundo para enamorarme de ti.- Y diciendo esto coge su mano, la acaricia y poco a poco va acercándose a ella.

¿Que está haciendo? ¿Va a besarla? Todo indica que si. Alice no sabe que hacer. No quiere besarlo pero tampoco quiere rechazarlo después de todo lo que le ha dicho. Si realmente está enamorado de ella le romperá el corazón. Y no quiere, conoce ese dolor.
Entonces él cierra los ojos, ella lo imita.
Lo siente, es un beso. Pero el objetivo no han sido sus labios, si no su frente.

Y por un momento sintió que quería ese beso, que lo necesitaba. Y es que lo que Alice no sabe es que la promesa de Justin está muy cerca de cumplirse.

No hay comentarios:

Publicar un comentario